A pocos pasos del «photo finish»
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Ya la llama panamericana se extinguió
julio 27, 2015
Que muchas cosas han pasado en estos últimos días, es que la emoción que se vive en estos Juegos durante las competencias es algo digno de admirar. Hoy tiré la agenda para el tenis de mesa a las 10:00 a.m., el béisbol a las 3:00 p.m., con softbol a las 4:00 p.m., volver al tenis de mesa 7:00 p.m., ir a voleibol 9:00 p.m., y culminar con la cena del staff a las 11:00 p.m. Me fui cómoda, como me gusta estar, en mahones y tenis, y no cualquier tenis, los tenis rojos, los Converse, de esos que decidimos ofrecer a nuestros atletas como parte de su ajuar, esos que nos han distinguido por las sedes y calles de Toronto.
En el tenis de mesa vimos como Bryan Afanador y Danielito González pasaban a la ronda de la tarde. Bryan iba contra Paraguay, sabía que ese fue el país que lo sacó de la final por equipo, así que ya saben como iba, con el único propósito de sacarlo de la cancha, lo logró 4-1. Minutos más tarde Danielito también impuso su juego contra PER 4-2. Salimos del tenis de mesa camino a béisbol, sabíamos que llegaríamos temprano pero como aquí queda todo lejos era mejor movernos hacia esta sede, donde también jugaba el softbol femenino. Y fue ahí donde la tarde se puso buena.
Venezuela era nuestro contrincante en el béisbol, juego importante donde el ganador aseguraba medalla. Aunque iniciamos anotando carrera en la primera entrada, ya en la quinta el #EquipoPUR perdía 8-2. Ya el juego de softbol, había comenzado en el parque continuo al béisbol. Recibo una llamada de Kike – «Jefa, creo debe moverse al softbol, estamos ganando 11-2 y ya en la quinta entrada se declara nocaut para PUR». Me despido de la gente linda del béisbol, camino rápido al softbol y allí llegué, justo a tiempo para verlas ganar 12-2. Que celebración, ganar ese juego también nos aseguraba por lo menos una medalla de bronce. Días previos había estado en juego contra CUB, el cual ganamos. Escuchar ese día a su entrenador Edwin decirles que ellas eran el mejor equipo que él había tenido en mucho tiempo, me dio la corazonada de que estarían en el medallero. La integración de las que viven en Puerto Rico con las que viven en los Estados Unidos no ha sido fácil, pero ahí están, aprendiendo a conocerse a través del deporte porque todas tienen el derecho de estar en este equipo, a todas las une el mismo país, Puerto Rico.
Las espero que salgan del dugout para poder darles un mensaje de felicitaciones y motivarlas para el próximo juego. De pronto se escucha una algarabía en el parque de béisbol que nos hace pensar que el juego se había empatado. Verifico el sistema de resultados e indica que PUR ganaba 9-8 en la parte baja de la séptima, última entrada pues el béisbol femenino se juega a siete entradas y Venezuela va al bate. Nos despedimos del softbol y caminamos al béisbol nuevamente para ver los últimos outs. De ganar asegurábamos medalla en el primer torneo panamericano del béisbol en unos Juegos. Una vez más, como en las películas conmovedoras del deporte, el béisbol puertorriqueño lo dejan en el terreno de juego en silencio, sin medalla. VEN ganó 10-9. Igual nos sucedió con el equipo masculino ante CUB. Ambos equipos merecían entrar al baile de medallas pero ambos quedaron fuera en la última entrada de juego.
El béisbol terminó a las 6:30p.m., lo que nos permitía volver al tenis de mesa para ver a Adriana jugar contra VEN. La nuestra esta vez fue superior, se llevó el triunfo 4-2, viniendo de atrás como siempre hace cuando las rivales son de cuidar. Con 14 años, Adriana se impuso a la venezolana de 19, quien también reside en Puerto Rico pues estudia en uno de los recintos de el Sistema Ana G. Méndez. Ese triunfo de Adriana la lleva a los cuartos de finales, a un triunfo de poder aspirar a una medalla panamericana, siendo la atleta más joven del torneo. ¡Que talento tenemos, de Utuado, Puerto Rico para el mundo!
En el voleibol no logramos la victoria ante BRA, un equipo poderoso donde su estatura y fortaleza se nota a simple vista. Todo el partido estuve sentada con Steven Morales, atleta nuestro de voleibol que sufrió una lesión en el tobillo, en el partido anterior, que lo llevó hasta el quirófano. Allí estaba sentado en su silla de ruedas, con su yeso descansando su pierna sobre una silla. Aproveché el momento no sólo para acompañarlo, sino también para conocerlo un poco. Aunque frustrado por no poder aportar al equipo en las semifinales, dice que quiere llegar a Puerto Rico con yeso pero con medalla al cuello.
Dos cuentos más y termino por hoy. Ayer llegué a bolos y me recibió Jean Francisco Pérez con una amplia sonrisa. Me dice que tenía un regalo para mi, lo que me asombra pues Jean es de los atletas más tímidos que conozco. Va a su bulto y viene con una camisa en mano. Me dice -«ésta la mande a hacer especialmente para ti. Le dije a mi esposa que no sabía si te iba a ver, pero aquí estás». Realmente me quedé sin palabras, jamás espero un regalo de ellos. Al contrario, pienso que soy la que debe regalarles a ellos. En bolos estuve hasta las 4:00p.m., sabía que me tomaría más de una hora llegar a la carrera de Javier Culson.
Y por poco no llego al atletismo. El tráfico estaba peor que el expreso de San Juan a Caguas un viernes de fin de semana largo. Hasta mi hijo Carlos me llamó para ver que pasaba que no llegaba y ya los atletas del 4×400 estaban preparándose. Que ansiedad, en el tapón, sin llegar, no le podía fallar a Javier. La chofera se esmero por llegar, hasta una luz roja se comió virando a la izquierda. Llegamos al estadio y salí casi corriendo, hay que pasar seguridad, que te escaneen acreditación, te chequeen la cartera, te pasen la pistola para detectar metales, y en el atletismo coger ascensor lento hasta el cuarto piso. Al subir me percato que empezaron a presentarlos, lo que nos permitió llegar justo a tiempo pues el nuestro iba por el carril ocho. Minutos de tensión, en ese balcón habíamos más de veinte personas del #EquipoPUR para ver la carrera juntos. Dan la salida y ahí vemos a Javier liderar el ritmo. 48.67 marcó su tiempo, segundo lugar, medalla de plata para PUR, el atleta de BAH, Jeffrey Gibson se llevó el oro con 48.51. Aunque todos queríamos el oro, celebramos la medalla número 14 para el país, la anhelada para Javier completar su colección. El llegó aquí buscando su primera medalla panamericana y se llevó la plateada. Allí me quedé para su premiación, desde días antes el puertorriqueño Víctor López me había confirmado formaría parte de la misma. El feliz con su medalla, y yo feliz por él. Estamos sin duda ante un extraordinario atleta, consistencia total en resultados y con un compromiso de agenda hasta Tokyo 2020. Bravo para Javier, eres especial.
A dos días de culminar Toronto 2015, queda acción todavía en ecuestre, balonmano, voleibol en ambas ramas, softbol, tenis de mesa, bolos, atletismo, esgrima y ciclismo. Llevamos catorce medallas, con la del softbol son quince y esperamos sumar otras más. Ya estamos en los últimos 50 metros, con vallas, con obstáculos, pero seguimos aquí con el mejor esfuerzo, dando cara ante el país, ese país que nos mueve, que nos motiva y por el que siempre daremos lo mejor de nosotros. Continuaremos……
P.D. Javier cumple años hoy 25 de julio cuando se publica este blog. Mis felicitaciones campeón, ya estás en Puerto Rico para disfrutar tu día con tu gente.
